La ventilación en viviendas es fundamental para garantizar una vivienda saludable

La calidad del aire es un elemento fundamental para nuestro bienestar, ya sea en casa, en el trabajo o en lugares de ocio. Es importante contar con un buen sistema de climatización y ventilación natural.

Desde el año 2007, el Código Técnico de Edificación cuenta entre sus exigencias con un epígrafe de higiene y salud. En él, se refleja la necesidad de que las viviendas han de contar con sistemas de ventilación y renovación del aire.

La aplicación de esta medida es obligatoria para los proyectos de edificación de obra nueva, rehabilitación y reforma. El objetivo, garantizar que las viviendas disfruten de un aire interior de máxima calidad.

Pero, ¿por qué es tan importante la ventilación en las viviendas?

Empecemos por lo más básico:

  • ¿En qué consiste la climatización? Según la IDAE, la climatización consiste en preparar el aire mediante unas condiciones de temperatura, humedad y limpieza adecuadas para el bienestar de las personas dentro de los edificios según la época del año, esto es, calefacción en invierno y refrigeración en verano.
  • ¿Qué es la ventilación natural? La ventilación natural consiste en permitir el flujo de aire exterior consiguiendo que las temperaturas se mantengan en los niveles de confort, de manera que se elimine o minimice la necesidad de sistemas de refrigeración en el verano. La calidad del aire mejora, asegura una buena ventilación y, a su vez, ahorra dinero y energía.

En las viviendas y locales donde las personas pasamos más del 80% de nuestro tiempo existen contaminantes en el aire que pueden afectar a nuestra salud.

El anhídrido carbónico que expulsamos los humanos al respirar y el olor corporal son los factores más evidentes que pueden causar un mal ambiente en una estancia, pero existen muchos más.

Son componentes orgánicos volátiles como barnices de muebles, pinturas, adhesivos, combustibles, materiales de higiene personal y de limpieza del hogar. Otros contaminantes contribuyen de forma importante a un ambiente insalubre tales como insecticidas, raticidas, combustión directa en la estancia, aerosoles, ropa que se airea en casa, moquetas, parquets y, por supuesto, el humo del tabaco.

Existen muchos más, pero de entre ellos destacaremos algunos importantes como los formaldehídos de los aglomerados y maderas, algunos aislantes y el gas radón que resulta especialmente peligroso ya que puede provocar cáncer de pulmón.

El gas radón es de origen natural y se desprende del radio que contienen algunos materiales como el granito, la piedra pómez o directamente del suelo o subsuelo. Tanto es así que la última modificación del CTE (Código Técnico de la Edificación) el 20 de diciembre de 2019 se incluyó el HS-6, Protección frente a la exposición al radón.

También existen otros aspectos a tener en consideración como los virus, bacterias y diversos microorganismos que con una buena ventilación son eliminados de forma efectiva.

Todos estos contaminantes tienen un origen y pueden ser reducidos o eliminados en parte, pero el único método realmente eficaz es la ventilación óptima del local o estancia, ello contribuye a una calidad del aire interior óptima y reduce la concentración de todos estos contaminantes.

ventilación

Consecuencias de una mala ventilación

La ventilación de las viviendas y locales viene evolucionando de un tiempo a esta parte, en 2006 con la publicación del CTE ya se obligó a una ventilación mínima en todas las viviendas, recientemente se ha incorporado el apartado del radón y en el futuro se implementarán nuevas disposiciones encaminadas a conseguir un ambiente interior saludable y confortable.

Desde siempre se ha tenido la costumbre de abrir las ventanas de casa durante unas horas o minutos, este tipo de ventilación aún es válida, aunque depende de cada persona.

La instalación de un sistema de ventilación óptimo requiere de un estudio previo ya que existen diferentes formas de ejecutarlo: sistema sólo extracción sin filtros, extracción y admisión con filtros o recuperadores de calor.

La implementación de unas soluciones u otras dependerá de varios factores, pero esto merece ser tratado en otro artículo.

Lo cierto es que la no ventilación en las viviendas y espacios cerrados como oficinas o centros de ocio, ya sea de forma natural o forzada, trae consigo problemas incluso de productividad.

Ventilación en oficinas

Un aire de mala calidad puede traer consigo la formación de gérmenes y bacterias en el ambiente. En el trabajo esto se conoce como el fenómeno de la oficina enferma y se traduce en que, si una persona tiene un germen, este se queda en el ambiente.

Esto trae consigo que, por la falta de ventilación, dicho germen se acaba transmitiendo entre el resto de trabajadores de la oficina. Por otro lado, el aire viciado en oficinas está relacionado con el descenso de la productividad.

La duda surge cuando no sabes qué tipo de ventilación te conviene más por el espacio que habitas o simplemente si no tienes posibilidad de una ventilación natural, qué tipo de climatización optar para una adecuada ventilación de tu vivienda o lugar de trabajo con el fin de lograr el bienestar

En cualquier caso, abre las ventanas y respira.

Carlos Sendra.

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